La que hoy acaba ha sido una semana rara. Por un lado, mucho trabajo en la oficina (lo cual mola, pero gracias a ello mi número de posts sin leer aumenta exponencialmente, de hecho desde el miércoles no he abierto el navegador más que para consultar algo del trabajo!), cogiendo alguna responsabilidad que otra, teniendo mi primera reunión en solitario con un cliente (Salva y yo le llamamos PoloFresa, y es un caso de PEBKAC… si yo os contara… :S)… en fin, que estoy muy contenta, aunque el tiempo libre escasee.
Y por otro lado, técnicamente perfecta en lo que a vida parejil se refiere: 5 días de rutina alternativa, un fin de semana genial (aunque Salva trabajara ayer) lleno de risas contagiosas, que ha incluido una visualización de La Princesa Prometida (cómo puede seguir emocionándome después de tantos años?) y 3 capítulos de Dexter (qué segunda temporada más buena!) y un domingo japonés (que ha consistido en comer sushi al mediodía y tempura por la noche, nyam, qué buena me ha quedado la salsa Tsentsuyu esta vez!), ha pasado casi un año desde el último sushi day, no está mal.
Lo de las risas contagiosas es algo que Salva lleva regalándome unos cuantos fines de semana, podemos tirarnos media hora riéndonos como tontos, olvidando al final de qué nos reíamos al principio. Me encanta, y esos momentos tontos hacen que le perdone cuando se le cruzan los cables porque la croqueta de arroz “le ha quedado fatal” (mentira! Pero cuando se pone negativo…) o porque se le ha destrozado la tortita (como si fueran para la Reina de Inglaterra… están buenas igual, no? Qué más da que estén un poco chuchurrías? 😉 ). Además, es él el que lleva semanas insistiendo en que veamos La Princesa Prometida, pero siempre lo posponíamos por falta de tiempo, y hoy me ha regalado ese visionado (además, estaba atento y se sabía algunas cosas! :P).
Lo último que me ha regalado este fin de semana (aunque éste no es un regalo emocional, sino físico) es lo que ilustra el post, que no es una pelotita antiestrés, sino una bolsa de ir a la compra. De hecho hace meses que debería tenerla, la pidió en noviembre pero la dirección de la cuenta de Pay Pal era la de sus padres y olvidó cambiarla, sus padres no recibieron nada y hasta hace un par de semanas no la reclamó, desde Flip & Tumble enseguida le enviaron otra y aquí está! Es una chorrada (de hecho la compra fue un reto entre Salva y yo, yo decía que no se atrevía a comprarla y él decía que yo no me atrevería a comprar los adornos navideños geeks, al final los 2 compramos algo!), pero mola, puedo llevar la pelotita en el bolso y si tengo que pasarme al Caprabo a por algo, no me hace falta coger bolsas de plástico (más ecológico y más cómodo, que al final la mitad de las bolsas acaban en la basura).
En cuanto a Dexter… si la primera temporada era soporífera, no sabéis cómo me alegro de que la historia del Ice Truck Killer me hiciera seguir viéndola, porque la segunda temporada es divertidísima! Para empezar, el acoso al que le somete Doakes hace salir a un Dexter desesperado, pero también más perverso de lo normal. Y la sponsor del programa de desintoxicación, menudo personaje! Lo mejor es cuando Deb se mete con ella (sobre todo cuando imita su acento inglés, es descojonante!!!). Esta tarde hemos visto 3 capítulos, y porque Salva tenía que ir a casa de sus padres a imprimir la tarjeta de embarque para mañana, que si no nos acabamos la temporada (nos quedan 3 capítulos más)! Cuando ha vuelto de casa de sus padres, me ha insistido durante un buen rato para que viéramos uno de ellos por lo menos, pero me he negado: si vemos uno, no habrá quién nos pare, y me gustaría irme a dormir antes de la medianoche (cosa que pese a la hora a la que me levanto, pocas veces conseguimos)!
Monday, 18 de February de 2008, a les 0:00
Espero que pueda seguir regalándote muchos otros findes de risas contagiosas 😉
También espero poder ver Dexter contigo en breve… MUST SEE THAT NAO 😀
Y lo del flip & tumble es una chorrada, pero está chulo y la verdad que me ha hecho darme cuenta que hay que reclamar cuando las cosas no llegan 😛
Y el maki&tempura… vamos, ni el kibuka, qué bueno estaba por dios!
Monday, 18 de February de 2008, a les 0:05
🙂
Monday, 18 de February de 2008, a les 1:25
doncs flipareu amb els 2 o 3 capítols finals de temporada de Dexter!
Monday, 18 de February de 2008, a les 6:28
oh! Dexter!! 😀
La serie.. Es imposible no ver los últimos 3 capítulos del tirón!
Monday, 18 de February de 2008, a les 10:12
Más que una pelota anti-estrés, esa bolsa parece una vaina de Marte lista para desplegarse e invadir la Tierra.
Tengo sobredosis de Doctor Who, perdón. 🙂
La próxima F&B que hagamos en Barcelona, nada de Kibuka. Voto porque la cena sea en Catering Milady 😉
Monday, 18 de February de 2008, a les 14:31
¿las fotos están en privado? Es que quería ver el sushi en grande pero no me deja.
Salva me imagino que lo dice por cumplir, pero la verdad es que la comida tiene una pinta INCREIBLE, me han dado ganas de volver a comer y todo 🙂
Monday, 18 de February de 2008, a les 15:33
@sunxez i @Arroz: entonces tenía razón en no querer ver ninguno ayer ;), ya se lo diré a Salva mwahahahah! Espero que mañana llegue pronto de trabajar y podamos ponernos a ello (hoy no que está en ses Illes y llega a las mil).
@MacGuffin: cuando vea Doctor Who (está enterrada entre miles de series pendientes :S) entenderé la broma xDD. Respecto al sushi, me conformo con prepararlo más a menudo (que no pase un año hasta la próxima vez), pero si le cojo práctica no te digo que no, ya pillaré a Samuel y montamos algo 😛
@Sopmac: sorry, se me olvidó ponerlas públicas, ya está ;). Salva no lo dice por cumplir (lo de que estaba más bueno que el Kibuka es una hipérbole :P), si le hubieras visto refunfuñando mientras los preparaba (“esto es una pérdida de tiempo, no sé para qué lo hacemos!”) y su cambio de actitud cuando los probó lo entenderías xDD (además, las piezas sobrantes volaron en casa de sus padres!)
salu2
Tuesday, 19 de February de 2008, a les 23:56
[…] what a week! […]