ser asocial
Escrit per Lady Madonna, a estudies o treballes?, friends i geek i reflexionsLo reconozco: como buena geek, soy bastante asocial. Por ejemplo, en el transporte público, prefiero ir con mi iPod y leyendo un libro o el periódico (o haciendo Sudokus, aunque ahora los tengo un pelín abandonados), que ir charlando con alguien. Muchas veces intento concentrarme en el libro y no mirar a mi alrededor, para evitar avistamientos (a eso también ayuda mi miopía :P).
Si coincido en el metro con un amigo o amiga, no es un gran problema (excepto si me quedo en un punto interesante del libro o la canción que está sonando en el iPod me encanta… cosa que sucede con frecuencia, jeje), porque para algo somos amigos, y tenemos temas de que hablar. Tampoco son un problema el resto de desconocidos que cada día viajan conmigo en el vagón (que son unos cuantos, en modo lata-de-sardinas :S), porque no me veo obligada a entablar conversación con ellos. Pero… y los grados intermedios de conocimiento?
Tenemos al excompañero del colegio o instituto. Si en su momento fuimos amigos, la conversación está más o menos solucionada, consiste en ponerse al día de nuestras vidas… a los 10 segundos de despedirnos habremos olvidado la historia del otro, pero así tendremos conversación para el próximo encuentro!
Si era ese alumno con el que nunca coincidí en clase, ése que estaba en una onda diferente y con el que apenas había cruzado dos frases, intento hacer el típico gesto de saludo con la cabeza y seguir a lo mío. Normalmente funciona, pero como el sujeto sea el típico extrovertido, ya lo tienes enganchado. Lo cual es un rollo por dejar de leer y escuchar música, pero por lo menos no tengo que preocuparme de la conversación, porque ya la lleva el otro.
Después tenemos al vecino. Ésta es una clase muy complicada, porque no sólo nos bajamos en la misma parada (hablamos de cuando vuelvo a casa), sino porque vamos exactamente (salvo por la parada del ascensor, y a veces incluso eso) al mismo sitio! Yo no conozco a mis vecinos más que de vista, de la mayoría no sé ni en qué piso viven, y la conversación de ascensor es perfecta para el corto trayecto del ascensor, pero no puedes dilatarla durante X paradas de metro y 5 minutos de camino hacia casa. Lo peor de todo es que si te encuentras a un vecino volviendo de trabajar, es muy probable que él también venga de trabajar… y ya tienes la maldición del vecino cada día. Actualmente sufro de este mal, hay una mujer, vecina de la otra escalera de mi portal, que cada día coge el mismo metro que yo. Un día me pilló desprevenida (suelo hacerme la despistada con esta especie… bueno en realidad me hago la despistada con quien puedo) y me dio palique (el menor de los males, pues sólo tienes que dejarla hablar y fingir que escuchas con atención), pero desde entonces la tengo controlada para evitarla. De momento, con éxito.
Y finalmente tenemos al compañero de trabajo, que también tiene diversas variantes. Cuando eres el nuevo, coincidir con un compañero en el metro es horrible (sobre todo si el compañero no es nuevo, porque estás en inferioridad de condiciones). Coincidir con un grupo de compañeros es peor. A mí me pasó el primer día en mi empresa actual (que por cierto, ayer hizo 3 meses que trabajo allí), a todo el mundo le dio por coger el tren (gente que normalmente iba en coche), yo no me sabía ni los nombres y ellos hablaban y yo no me enteraba de nada. Afortunadamente no es lo normal, y hasta hace poco coincidía sólo con Cris, con la que tengo algo más de confianza.
Otro caso peliagudo es cuando ya no eres nuevo, pero coincides con uno que sí lo es (o sea el caso contrario). Tú no le conoces; él no te conoce; a veces él no sabe qué haces tú en la empresa o cuánto llevas (puede pensar que eres veterana pero apenas llevas dos meses más que él). Pero bueno, aquí tienes el poder, puesto que será el nuevo el que hará preguntas e iniciará la conversación (o no… ver siguiente caso).
Pero lo peor que te puede pasar es que ese nuevo sea un tío rarito. Un tío que no habla, que cuando le haces las típicas preguntas del manual de conversación fácil te contesta con monosílabos (saltándose el manual!), que cuando vas en grupo caminando y él se acerca no dice ni hola (simplemente se añade al grupo)… Creedme, esa especie existe. Yo estoy sufriendo un ejemplar. Además es un caso grave, porque coincidimos en todo el trayecto de tren y de metro (él va unas paradas más allá). En el tren suele ir más gente, pero luego en el metro vamos solos (a veces Cris tiene alemán y coge otra línea de metro, a veces coge otro tren para luego ir a piscina, y a veces, como hoy, se escaquea vilmente y en el último momento decide coger el otro tren porque sí… Cris mala!). Hoy he descubierto que es posible hacer un trayecto de 10 paradas de metro sólo diciendo “bueno, hasta mañana” al final.
Y sólo llevo dos días. Alguien tiene alguna idea para evitar esta tortura? El lunes me libré porque tenía que entrar en la Fnac, pero (por mucho que me guste) no puedo ir cada día… no? Asociales del mundo, venid a mí!!