[Short note: si piensas venir a Madrid el fin de semana del 16 al 18 de noviembre y todavía no estás apuntado al grupo, no sé a qué esperas!]

Menuda semana de sueño acumulado… El fin de semana pasado fue un visto y no visto, y por suerte esta semana ha sido más corta (estoy de puente, pero Salva no, mwahahahah! :P), ayer dormí hasta las 14h (claro, que también me fui a dormir después de las 2h, cosas de celebrar la Castanyada en casa, que hasta que no se van los demás no puedes pillar la cama…) y hoy ya empiezo a ser persona.

El sábado pasado fuimos a la primera CampusMac Session, en principio el tema iba a ser Quicksilver y el ponente iba a ser el vecino, pero dado que el día antes salía Leopard, se cambió el tema de la sesión, y la dio Unamito. Salva y yo quedamos con Pedro Leopard Aznar (en esta ocasión no tanto por su tardanza sino por llevar consigo nuestra copia de Leopard :P) en la parada de metro y fuimos hasta Microgestió, donde nos sorprendió encontrar a más de 50 personas en la sala, cuando en teoría teníamos que ser 22…

La primera parte fue más tranquilita, estábamos todos callados como si de una clase de universidad se tratara (mentira, yo en la universidad no paraba de hablar con los compañeros :P), aunque algún gamberrillo se dedicó a hacer spam cuando Unamito mostraba el nuevo iChat (lo mejor es que funcionó, Unamito abrió Applesfera!). En el descanso se marchó mucha gente, y en la segunda parte hubo gente que hasta se instaló Leopard! Fue muy interesante la charla, pero sobre todo, volver a ver a algunos viejos conocidos de otras quedadas o la misma CampusMac.

Después de la session nos dirigimos al Pans & Company de Villarroel, donde algunos ya aprovecharon para jugar al Quake. Y cómo no, acabamos en el Starbucks del Maremàgnum, con un frappuccino en la mano. La mala noticia es que dicho Starbucks no tiene WiFi, así que no hubo online blogging (bueno, Salva hizo un intento con una red abierta que se pillaba más bien poco). Algunos se instalaron Leopard, otros consiguieron una copia 40 euros más barata (a Harry le valió la pena el viaje desde Madrid! :P), otros siguieron con sus partidas de Quake (pronto se inventará el concepto MicroCampusMac :P), otros repartieron tarjetitas de su tienda, y otros intentábamos pillar la red abierta manteniendo nuestros iPhones/iPods Touch en alto (Christian y yo)… También hubo quien hizo un castillo de naipes con MacBooks mientras otros juntábamos todos los iPods e iPhones de los asistentes, y Lord Zoltan y yo le dedicamos un vídeo a Pumpkin.

Me lo pasé genial, como siempre. La nota curiosa la pusieron un par de chicas que se acercaron a nosotros para preguntarnos si eso que teníamos ahí era un iPhone, y al responder que sí nos pidieron que se lo enseñáramos. Christian les estuvo haciendo una demostración, las chicas fliparon con el cacharrito…

El domingo fue un día agotador, ya que celebramos la primera comida familiar en nuestra casa… los abuelos de Salva estaban en Mataró, y como todavía no habían visto el piso, los invitamos a comer. También vinieron sus padres y su hermano. El menú era fácil, y menos mal! Yo preparé un guacamole, de primero hicimos una ensalada, y de segundo, carne y pescado (carne para todos excepto su madre y su abuela, que son más de pescado…), acompañados por una salsa de queso que hizo Salva con la receta de su hermano. Toda la mañana preparándolo todo y adecentando la casa para, a las 13:30h, darnos cuenta de que no habíamos sacado la carne y el pescado del congelador. Encima, tenemos un horno-microondas que no sabemos muy bien cómo va y no tiene función de descongelar… Con el pescado no hubo mucho problema, lo metimos un poco en el microondas y quedó bastante bien, pero la carne era una piedra, y tras un minuto en el microondas empezó a cocinarse, así que la sacamos y esperamos…

A las 14h llegó toda la familia, y como la cosa pintaba para largo, puse el guacamole y los nachos (esta vez no eran caseros… no me hubiera dado tiempo!) para picar, y parece que les gustó! Yo pensaba que había hecho demasiada cantidad, pero se lo terminaron todo! Con la ayuda de mi suegra conseguimos acabar de descongelar la carne, y la verdad es que todo quedó buenísimo. Y de postre, ensaimadas de Mallorca (de algo tienen que servir esos frecuentes viajes de Salva a la isla!).

A todo esto, yo había clonado mi disco por la mañana para luego instalar Leopard. En principio yo quería hacer una simple actualización (no es una de las cosas de las que presumen los maqueros, que no hay que formatear para instalar el nuevo sistema operativo?), pero Salva me convenció de que era mejor instalar de cero (este artículo también ayudó), y como él lo había hecho así y había podido recuperar todos sus datos y configuraciones con apenas un par de clicks (Carbon Copy Cloner + Borrar e instalar + Asistente de migración [Otra unidad de este Mac]), me decidí a ello. Además de clonar el disco, copié a mano la librería de iPhoto en el otro disco externo, como llevaba haciendo hace tiempo (mi Time Machine manual :P). Justo cuando llegaron los invitados empezaba a instalar el sistema, así que lo dejé instalando mientras comíamos. Mientras Salva preparaba los cafés, vine a ver cómo iba la instalación, ya había acabado y me dispuse a importar los datos… pero el asistente de migración me decía que había 0KB… en ese momento me habría tirado por la ventana, si no fuera porque por lo menos, las fotos estaban a buen recaudo, pero igualmente me dio rabia perder todas mis aplicaciones, configuraciones, documentos, series que todavía no había copiado en el disco externo… Tenía un ordenador nuevo, vamos.

Salva intentó tranquilizarme, seguimos adelante sin importar los datos, y una vez en Leopard, volví a intentar migrar los datos. Salva estaba con los cafés, y Pere (el cuñaooo!) vino a ver cómo era el nuevo sistema operativo. En el asistente de migración me aparecían 2 unidades, una parecía un disco de sistema y la otra no, probé con la del disco de sistema (era la pinta que tenía el disco clonado de Salva) y nada… Pere sugirió que probara la otra unidad, y bingo! No sé qué pasó para que el asistente de migración en el inicio de Leopard sólo me detectara una de las dos unidades, y precisamente la que no contenía nada, pero por lo menos al final todo se solucionó 🙂 (gracias Pere, por la paciencia!). Sustos aparte, es impresionante lo de clonar el disco: tengo un nuevo sistema operativo, pero he recuperado absolutamente todas las configuraciones del sistema, de las aplicaciones… como si no hubiera hecho nada, pero con Leopard en lugar de Tiger!

Después, mientras mi suegra le daba unas clases magistrales de planchado de camisas a Salva, yo le estuve enseñando Leopard a Pere… y también jugamos con la iSight y el nuevo Photo Booth (me costó un poco convencerle, no quería salir en internet… toooma! 😛 Aunque luego por la noche bien que me pidió las fotos…). He de decir que los nuevos efectos no funcionan del todo bien, la detección del fondo falla bastante. He probado a aumentar la luz, como me decía Sopmac en un comentario, y mejora un poco, pero sigue sin ser perfecta. De todas maneras, me gustan más los efectos antiguos (además, me lo parece a mí o los han mejorado? Ya tenían la barra de configuración?).

A las 18h estaba agotada, me hubiera ido a dormir si el domingo no fuera el día de Porca Misèria (y de momento no tenemos vídeo ni manera de grabar de la tele), estuvimos recogiéndolo todo y vimos el capítulo de How I Met Your Mother de la semana (3×05 – How I Met Everyone Else), y fue awesome, creo que es el capítulo con el que más me he reído, y durante más tiempo… Para empezar el nombre de la nueva novia de Ted (como el Ted del futuro no se acuerda, se pasa todo el capítulo llamándola Blabla), siguiendo por la analogía del sandwich (lo mejor es el final, en la fiesta de antiguos alumnos xDD), por las historias de cómo se conocieron los protagonistas, la Crazy Scale de Barney y la traca final: la escena en World of Warcraft.

El lunes estaba muerta de sueño, pero había quedado con los Pochamen. Antes de ir hacia el Origginals, pasé a ver a mis padres, mi madre me cargó con panellets y croquetas (estas madres…). Llego al Origginals… y está cerrado. Frak! Acabamos cenando en un Pans, y cuando llegó Duke (el que más se conoce la zona, pues vive allí) nos fuimos a un bar donde recordé mis tiempos aachenianos tomándome un Desperados (cerveza+tequila). A las 22:45h, Alberto y yo nos fuimos hacia Sants, donde él cogió el metro y yo el tren hacia Mataró. Llegué a casa a las 0h hecha polvo, así que el martes, seguía muerta de sueño.

El miércoles celebramos la Castanyada en casa, vinieron los amigos de Salva y cenamos embutidos, pa amb tomàquet, un par de tortillas buenísimas de Salva qué-mala-me-ha-salido Castro, y panellets. Como siempre falla algo, alguien se olvidó de las castañas, pero bueno. De charleta hasta las 2 de la mañana, y cuando se fueron los últimos, me fui directa a la cama.

Como decía, hoy ya empiezo a ser persona, aunque llevo todo el día entre lavadoras y fregonas… faena acumulada del finde pasado, que no tuvimos tiempo de casi nada…

Aquest post es va publicar el Friday, 2 de November de 2007, a les 16:40, i està arxivat a aachen, as you wish, blogs, family, friends, geek i that's life i tv. Podeu seguir les respostes al post a través del feed RSS 2.0. També podeu deixar un comentari, o bé fer un trackback des de la vostra pàgina.