Los Cylons fueron creados por el hombre. Fueron creados para hacer la vida más fácil en las Doce Colonias. Pero llegó un día en que los Cylons decidieron matar a sus amos. Tras una guerra larga y sangrienta se declaró un armisticio. Los Cylons marcharon a otro mundo para ellos. Se construyó una remota estación espacial donde Cylons y humanos pudieran reunirse y mantener relaciones diplomáticas. Cada año las colonias enviaban a un oficial, los Cylons no acudían a la cita. Nadie ha visto ni sabido de los Cylons a lo largo de más de cuarenta años.
No me gusta la ciencia ficción. Vi la primera Star Wars (el Episodio IV) cuando era pequeña, y me aburrió bastante. De mayor las he visto todas (incluso las nuevas), más que nada porque Salva es un gran fan, y aunque no me aburrieron tanto como de pequeña, no matan. Tampoco he visto ninguna Star Trek… Pero Galactica no es CiFi. Es una serie dramática disfrazada con elementos de CiFi: sí, vale, van en naves espaciales y huyen de unos robots… pero los problemas que tienen son muy reales y muy del siglo XXI (terrorismo, democracia, nazismo, discriminación, libertades…).
El viernes Salva y yo acabamos con la segunda temporada (nos dejó con la boca abierta) y empezamos con la tercera (sólo vimos dos capítulos porque nos vencía el sueño, no porque la trama no estuviera muuuy interesante!). Y ayer decidí volver a ver la miniserie. Y es que como digo, la ciencia ficción nunca me atrajo, y si accedí a ver Galactica fue porque, además de que Salva me lo propuso (se lo habían recomendado por ahí), había leído muy buenas críticas en la blogosfera. Así que gracias, gracias, gracias, a todos los que hablasteis bien de Galactica (ahora me acuerdo de MacGuffin, pero seguro que hay más). Pero cuando vimos la miniserie, hace dos meses, no me enteré mucho de los detalles. Y ayer la disfruté mucho más. Vi a un Comandante Adama mucho más frío que ahora, a una Laura Roslin igual de decidida (entonces era una simple maestra de escuela, después de casi dos años es toda una presidenta… de verdad), a un Coronel Tigh muy capullo (con el tiempo descubres que sí lo es, pero tiene un fondo bueno), a un Apollo bastante chulito (despreciando a los Vipers de exhibición por antiguallas, y dudando de si el antiguo Viper de su padre podrá volar… pues es lo que te salvará la vida, chico!), a una Starbuck chicazo (con el tiempo le sale la vena femenina, pero al principio es como su predecesor Dirk Benedict!)… Es curioso ver cómo han cambiado los personajes a lo largo del tiempo. El revisionado de ayer también me sirvió para ver cómo cambia el doblaje de la miniserie a la serie: los Vipers son Víboras, Helo (jílo) es jélo, Tyrol (táirol) es tírol…
La primera temporada son sólo 13 capítulos, a cada cual más estresante. Y es que lo que no falta en esta serie es tensión. El primer episodio, 33 minutos, es un ejemplo de ello: la flota realiza saltos FTL para huir de los Cylons, pero los Cylons los encuentran exactamente en 33 minutos, así que deben estar atentos para volver a saltar, con lo que hay poco espacio para el descanso.
No hay tranquilidad en esta primera temporada, vamos susto tras susto, pero lo que sí hay es algo de humor, gracias al Dr. Baltar y su Número 6. Que la Cylon que le sedujo para organizar el ataque se le aparezca parece raro al principio, pero después es lo más divertido de la serie, aunque sigue siendo algo intrigante que ella siempre sepa qué va a pasar, o que confíe en la mano de Dios (un apunte: los humanos creen en los Dioses de Kobol y los Cylons en Dios… cuando en la última quedada con los Pochamen les hablé de Galactica y les dije esto, Jordi dijo “ah, los buenos son politeístas y los malos monoteístas!”). Otro detalle gracioso (esto sólo es un spoiler si no has visto absolutamente nada de Galactica) es que en uno de los capítulos de esta temporada, a Boomer le preguntan de dónde es… ella responde que de Troya. Como el caballo!
Y al final… un cliffhanger total. Un momento que me hizo saltar del sofá y exclamar “no puede ser, no puede ser!” (Salva no estaba conmigo, tuvimos ciertos problemas). Me recuerda a Alias en ciertos aspectos, como que a veces en el minuto 39 de capítulo la trama se ha resuelto felizmente… y en el minuto 40 las cosas se tuercen y los personajes quedan en una situación delicada. Eso está bien, porque nunca sabes cómo va a acabar realmente un episodio.
La segunda temporada también empieza fuerte, y tiene para mí los mejores capítulos de una serie que he visto nunca, Pegasus (2×10) y La Nave Resurrección (2×11 y 2×12). No voy a spoilear a nadie, pero baste decir que a Salva y a mí nos hizo aplaudir. Esa trama es impresionante, pero después de ella vienen tres episodios de relleno, que no hacen más que desasosegarte pensando en cuándo vendrá lo bueno. El último capítulo antes del doble final, 2×18 – Downloaded, es lo más divertido, irónico y bien llevado que he visto. Y empieza a sentar las bases para lo que vendrá, aunque entonces no lo sabes.
La segunda temporada también acaba en cliffhanger. Cinco minutos antes del final parece que todo está bien, pero tú sabes que no lo está, la tensión crece y crece… hasta que pasa lo que pasa. Dioses de Kobol! Por cierto que el último capítulo se emitió en España con menos metraje, y aunque a veces sí que quitan cosas sin importancia (como que de una batalla quiten dos segundos de disparos), se han cargado diálogos importantes (you do me and I do you). En casos como éste, más que nunca, adoro el P2P.
Lo único que no me gusta (ligeros spoilers en este párrafo), es que a veces tengo la sensación de que algunas cosas pasan rápidamente, sin profundizar, temas que parecían importantes de repente no lo son. Por ejemplo, el soldado cylon de Starbuck. Podrían haberle dado mucho uso… pero lo pierden a la primera de cambio. Y el Pájaro Negro, una muy buena idea (y me emocioné con el nombre que le dieron) que consiguieron llevar a cabo muy rápidamente y se perdió casi tan rápido.
La tercera temporada la estamos viendo en inglés. Qué cambio! Por fin he podido oír los continuos frak (el equivalente galáctico de fuck), me encantan! De momento la vemos sin subtítulos, y la verdad es que se entiende bastante bien, aunque yo preferiría verla subtitulada para no perderme absolutamente nada… Pero a Salva le molestan los subtítulos. Lo malo es que ahora tengo que volver a acostumbrarme a la jerga militar en inglés (buenísimo cuando Adama le está diciendo a su hijo que debe ponerse las pilas, y luego le dice “Dismiss!”, yo pensé “WTF??!! Le dice lo que tiene que hacer pero le despide? Debo haberlo entendido mal”, hasta que Salva me dijo que dismiss es lo que se dice para dar por finalizada una reunión).
En cuanto a las primeras impresiones, me sorprende el graaan cambio de Apollo, me encanta ese Gaeta despeinao (a Salva nunca le cayó bien pero es bueeeno), me gusta e inquieta a partes iguales la nueva tarea de la Boomer de Helo, con un diálogo genial entre ella y Adama que no me resisto a poner:
– [Boomer] How do you know that you can trust me?
– [Adama] I don’t. That’s what trust is.
En cuanto al destino de Starbuck y su cambio de actitud en el segundo capítulo, sólo digo que espero que estemos delante de una estrategia tipo Julia Thorne (quien siga Alias me entenderá 😉 ).
Ya nos quedan pocos capítulos para ponernos al día, pero después de ver las dos primeras temporadas en plan maratón (la primera nos la tomamos con más calma, pero la segunda la hemos acabado en dos semanas!), no sé si podré soportar ver sólo un episodio a la semana. La parte buena es que podré leer todo (o casi todo) lo que se escriba sobre la serie sin miedo a spoilearme! Que por cierto, con el título de los webisodios podría haberme spoileado pero afortunadamente pensé que se trataba de la resistencia de Caprica.
Por otro lado, me encanta la careta de la serie (sobre todo en la segunda temporada, con el número de supervivientes actualizado), y la introducción que hay en cada capítulo… La que puse al principio es la de la miniserie, en la serie es mucho más corta. A lo largo de las tres temporadas ha cambiado un poco, en la primera da alguna información que en la segunda y tercera se obvia. Para mí es un ritual recitarla al principio de cada capítulo!
Los Cylons fueron creados por el hombre.
Evolucionaron.
Se rebelaron.
Existen muchas copias.
Y tienen un plan.
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