En septiembre hará 3 años de esto. Lo que se suponía que iban a ser 6 meses se convirtió en año y medio de mañanas en el Cliente, tardes ociosas en la oficina, y otro año y medio con una dinámica diferente que ha sido bastante más interesante y productiva. Por lo pronto, he podido participar activamente en un proyecto, algo que hace dos años veía inviable, y he estado de apoyo en otro (la idea inicial es que lo llevara yo junto con mi jefa, pero dada la envergadura del proyecto – en los momentos álgidos recibíamos al menos 50 mails al día :S – y que yo no estaba en la oficina todos los días fue imposible).

En el Cliente, las cosas han seguido como siempre: trabajo monótono en general, con momentos puntuales interesantes cuando había alguna implantación (el año pasado por estas fechas empezamos la migración a ToIP de los centros principales de una de las empresas del grupo, y este año estamos haciendo las oficinas; también hicimos a finales de 2010 una reestructuración general de los 902 de la empresa, que fue muy entretenido… lo que más me gusta es trabajar con Call Centers, eso está claro :D)… y mucho curro. El junior que me ayudaba (aunque es un decir, nunca llegué a traspasarle ninguna tarea importante, él estaba en otros temas y era complicado que los dos tuviéramos tiempo en la oficina para enseñarle cosas) tenía contrato hasta final de 2010, y no le renovaron (nueva política en mi empresa: ahora no hacen contratos indefinidos… así que cuando llevas 2 años de contrato “de prácticas”, que estarían obligados a hacerte indefinido, te echan), y el que me pusieron en su lugar… pfff sin comentarios (solo diré que @verleh le puso el acertado mote de T3).

Y tanto curro había, que un buen día a mediados de abril el RC me llama y me dice “Cristina, coméntalo con quien lo tengas que comentar, queremos aumentar un 50% la dedicación, y que vengas un día más aquí”. Conforme cuelgo la llamada, vuelvo a levantar el teléfono para decírselo al Gerente, dejando claro que yo NO quiero ir 3 días al Cliente y dedicarle aún más horas en la oficina, que ya estuve año y medio sin hacer nada más que el Cliente y no quiero volver a eso. Me pide que le envíe un mail con las tareas para las que creo que el RC pide este aumento de dedicación para comentarlo con la Socia. Se lo envío 5 minutos después.

Durante mes y medio el RC me estuvo preguntando prácticamente cada día que me veía que cómo estaba el tema. Yo le decía que lo estaban comentando internamente. A mí nadie me decía nada. A finales de mayo (una semana antes de mis vacaciones californianas) hubo una reunión entre la Socia, el Gerente y el RC, era uno de los días en los que yo estaba en el Cliente y de repente el RC viene y me dice “Cristina, hay gente de tu empresa que quiere hablar contigo”, voy y me meto en una sala de reuniones con la Socia y el Gerente, el RC se marcha. La Socia y el Gerente me dicen que le han presentado una opción para sustituirme (quitarían a una persona de otro cliente, con algo de experiencia en proyectos de gestión, y lo pondrían enseguida allí, y yo desaparecería en cuanto fuera posible) pero que al RC no le ha convencido, que me quiere a mí. Halagada, pero no way! Me preguntan si quiero quedarme (aunque saben la respuesta de antemano), y allí empezamos los tres a buscar soluciones. Porque quedarme yo allí no es una opción (bien!). Entre otras cosas porque mi jefa está embarazada y en septiembre alguien se tiene que quedar sus proyectos, y en lo que trabaja ella (ToIP) los demás seniors no tienen mucha experiencia, y si hay alguien que sepa de ToIP soy yo. Yo remarco la necesidad de que si hay que hacer traspaso se haga en casa del Cliente y no en la oficina.

Yo me fui de vacaciones, y no volví a saber del tema hasta un viernes de mediados de junio, en el que recibo un mail de la maquera (nuevo personaje: cuando entró en la empresa usaba Mac, ella y yo éramos las únicas – ahora somos bastantes más, y mira que yo no evangelizo 😛 -, el nombre va en minúsculas con toda la intención… no me cae muy bien, no :P) en el que me dice (entre emoticonos varios… ejem) que “no sé si lo sabes, pero voy a sustituirte en el Cliente”. Tremendo :O. Pues no, no lo sabía. Así van las cosas en mi empresa. El Gerente le había dicho que empezaba ya (solo faltaba que el RC aprobara su CV, porque no me iba a cambiar por cualquiera :P), pero ella tenía una puesta en marcha de otro proyecto de su departamento en esos días así que, después de las correspondientes peleas entre gerentes, la maquera empezó a venir conmigo al Cliente a finales de junio. Sí, por fin se me hizo caso, mi empresa se comería las horas durante el traspaso, pondría a dos recursos haciendo lo mismo y cobrando por uno durante un tiempo, para que el traspaso fuera rápido.

La casualidad quiso que nuestras vacaciones de verano no se solaparan (yo me las había coordinado con T3, que era quien en principio me haría de backup en vacaciones, y ella con nadie, porque no estaba en ningún proyecto de este tipo), porque ambas teníamos viajes pagados (y mira que yo normalmente no viajo en agosto, pero este año nos vamos a London a ver a Samuel, yay!). El planning: en julio estaríamos las dos los mismos días que yo hacía antes, en agosto empezaríamos, cada una por su lado cuando no estuviéramos de vacaciones, a hacer 3 días en el Cliente, y septiembre ya se quedaría ella allí, y yo quedaría de responsable del proyecto, haciendo seguimiento con el RC (algo que hasta ahora hacía el Gerente, intentábamos hacer una reunión mensual pero acababa siendo trimestral :P). La parte mala de todo esto es quedarme prácticamente sin jornada intensiva: el año pasado ya me perdía 2 días a la semana, pero es que este agosto solo he hecho intensiva los martes (bien) y los viernes (que en realidad es peor, porque durante el año los viernes salgo a las 14h y en jornada intensiva a las 15h). Pero todo sea por un último empujón!

Total, que en julio he sufrido mucho a la maquera. Y lo de sufrir es literal: el primer día, mientras esperábamos al Gerente en la puerta del Cliente porque se suponía que la iba a presentar al RC (después de media hora le llamé, y resulta que se le había olvidado y había ido directo a la oficina, así que tuve que presentarla yo e inventarme el roadmap), me estuvo taladrando durante media hora con el tema “yo no me merezco estar aquí, esto no me gusta y es un paso atrás en mi carrera, que sepas que estoy buscando trabajo y en cuanto encuentre algo me largo” (el primer día!!! Antes de empezar!!!). A la hora de comer, el tema fue “yo no me merezco estar aquí, esto no me gusta y es un paso atrás en mi carrera, que sepas que estoy buscando trabajo y en cuanto encuentre algo me largo”. Y durante el resto de días que fuimos al Cliente, a la hora del café, a la hora de la comida, a la hora de ponernos a hacer algo juntas, el tema siempre era “yo no me merezco estar aquí, esto no me gusta y es un paso atrás en mi carrera, que sepas que estoy buscando trabajo y en cuanto encuentre algo me largo”. Cansina, no? :S

Y las pocas veces que su tema no era “yo no me merezco estar aquí, esto no me gusta y es un paso atrás en mi carrera, que sepas que estoy buscando trabajo y en cuanto encuentre algo me largo” (ojo, que yo repito la frase pero no creáis que ella es creativa, no… me ha llegado a explicar la misma historia – por ejemplo, que había hablado con una Gerente de nuestra empresa para avisarla de que estaba buscando trabajo – varias veces!!! En el mismo día!!!), era lo poco exigentes que son en nuestra empresa con los departamentos menores (facturación y otro de gestión, donde los trabajadores no suelen ser telecos), que les pides algo y te envían churros y no pasa nada (en esto no le falta razón, no es porque no sean telecos pero hacen un trabajo muy mecánico y no se preocupan por entenderlo, por lo que en cuanto les pides algo se pierden :S), en comparación con los departamentos de telecos en los que por cualquier pequeño fallo te montan un cristo. Bueno, le he visto hacer algunos fallos que… pfff.

Ya que estoy en modo rant sobre la maquera, y para que acabéis de haceros una imagen mental sobre ella: escribe correos de manera súper coloquial, emoticonos por doquier, “ke” (por “que”) y “pa” (por “para”) a discreción, signos de interrogación y exclamación múltiples al final (e inexistentes al principio)… por si os lo estáis preguntando, sí, yo en correos de trabajo escribo bien, mis manías sobre el lenguaje las dejo para mi casa (y mi blog es mi casa :P). Y mira que yo abuso a menudo de los emoticonos (no tenéis más que contar los de este post :S), pero en correos de trabajo me parecen horterísimas, los uso en contadísimas veces, cuando la ocasión lo merece y la complicidad con la otra persona es muy manifiesta. Y está claro que no es el caso.

Bueno, volvamos al tema… en fin, que si desde el primer día ya me está diciendo que se larga, mis esperanzas de librarme del Cliente se desvanecieron un poco. Y más cuando casi a final de julio me dijo que en septiembre se piraba definitivamente… y tal como me lo dijo, sin darme fecha (le pregunté y me dijo que en principio a final de mes), me pareció entender que no tiene otro trabajo esperándola, así que no sé si es un farol…

En todo este tiempo no he visto la luz al final del túnel. El Gerente me decía que en septiembre yo ya no estaría allí pero yo al Cliente le he ido hablando de “septiembre-octubre” por si acaso, todo el mundo (la Socia, mi antigua jefa, mi jefa actual, mi Gerente…) me decía “por fin, no? Estarás contenta!” y yo contestaba “lo creeré cuando lo vea”… hasta hace unas dos semanas. Mi jefa, embarazadísima, me dice el día antes de sus vacaciones que ella ya no vuelve (no le toca parir hasta la segunda quincena de septiembre, pero lo típico, encadenará vacaciones con la baja), y empieza a traspasarme proyectos: ni uno, ni dos, ni tres, sino cinco proyectos. Tres están en sus últimos coletazos: en uno de ellos he estado implicada desde el principio así que lo llevo al día; otro es el que comentaba antes de los 50 mails por día y, aunque ahora ya no se recibe ese volumen, me da muchísimo miedo porque el que se supone que tiene el detalle es T3, pero por las advertencias de mi jefa, parece que hay que mirarse lo que hace con lupa porque tiene fallos muy estúpidos; el tercero es uno en el que no he participado pero parece que quedan 4 tonterías (lo malo es que el junior también es T3 :S). Pero los otros dos son los que dan respeto, porque están empezando y al menos uno de ellos pinta que será denso (bastantes oficinas repartidas por el territorio).

En ese momento me agobié bastante, pero luego, comentándolo con el Gerente, lo entendí: me estaba agobiando porque intentaba ubicar mentalmente esos 5 proyectos en mi semana actual de tres días en la oficina (sin contar que en agosto ya solo he estado haciendo dos, ya que en el Cliente he empezado a hacer los 3 días que pidieron) y simplemente no me caben. Pero vi una convocatoria de reunión del proyecto de los 50 mails, para mi primer día después de las vacaciones, un lunes, que habitualmente es uno de los días que voy al Cliente, y pensé: “vale, en septiembre ya no voy al Cliente lunes y miércoles, es oficial”. En ese momento vi la luz al final del túnel… da igual que la maquera se pire de la empresa, los proyectos de telefonía no pueden hacerse solos, así que ya se las apañarán.

Esta semana, como no hay ningún responsable ni en mi empresa ni en el Cliente, me he cambiado los días para poder hacer intensiva mañana, que nos toca hacer maletas para la boda 2.0 del sábado (se nos casan @alchapar y @mariapidal, jurjurjur). Eso significa que hoy, 17 de agosto de 2011, 2 años, 11 meses y 2 días después, he podido decir #byebyeCliente.

(y encima ha servido para resucitar mi blog, no os quejaréis… queda alguien ahí? :P)

Conclusión: en mi empresa el tiempo funciona a diferente velocidad que en el resto del mundo, lo que para ellos son 6 meses en un reloj normal son 3 años 😛

Aquest post es va publicar el Wednesday, 17 de August de 2011, a les 20:49, i està arxivat a estudies o treballes? i that's life. Podeu seguir les respostes al post a través del feed RSS 2.0. També podeu deixar un comentari, o bé fer un trackback des de la vostra pàgina.