Hoy es Sant Jordi, y como siempre hemos ido a pasear por el centro de Barcelona. Pero este año ha sido bastante agobiante, y no sé si es porque había muchísima gente (siempre la hay) o porque Salva no se encontraba muy bien (esto me suena :P), pero al final hemos acabado comprando nuestros respectivos libros (me gusta más ir los dos y elegirlos que no que cada uno lo compre por su cuenta), y al Starbucks a descansar de gentío. Supongo que el año pasado, al ser domingo, pudimos espaciar el paseo durante todo el día, y aunque luego acabara muerta, no se notaba tanto el agobio de gente.
Este año me han caído dos rosas: la de Salva y una de parte de mi jefe, que a media mañana nos ha sorprendido (al menos a mí, que era mi primer Sant Jordi allí) entrando en la sala con un montón de rosas y repartiéndolas entre las chicas. Es una de las cosas curiosas de ser una empresa pequeña, todo es muy familiar.
En cuanto a los libros, Salva por fin ha conseguido el que quería el año pasado, pero que entonces no hubo manera de encontrar: Blade Runner (sí, ya sé que no es el título original, pero este año lo han reeditado con este título). Yo no tenía yo muy claro si pedirme el de monólogos de Buenafuente (Com anava dient), o El llibre mediàtic de Polònia (libro mediático, como indica el nombre, del programa de sátira política de TV3, del que ya he hablado en alguna ocasión). Pero mira por dónde, mientras buscábamos Blade Runner (por cierto, normalmente los de la Fnac son bastante majos y entendidos en la materia, pero hoy nos ha tocado uno borde que encima nos ha enviado a la sección que no era, donde lo hemos buscado como locos y al final, al volver a preguntar ahí, nos han reenviado a la correcta… precisamente hoy, que cruzar dos veces la Fnac de lado a lado era misión imposible!), he dado con El caso Jane Eyre, que tenía apuntado en el móvil como pendiente desde que vi la reseña de Wicho y supe que Pjorge iba a traducirlo. Y sin dudarlo un minuto, lo he cogido. Curiosa la reseña de The Wall Street Journal que aparece en la contraportada:
Deliciosamente inteligente… Repleta de agudos juegos de palabras, alusiones literarias e ingenio bibliográfico, El caso Jane Eyre combina elementos de Monty Python, Harry Potter, Stephen Hawking y Buffy la Cazavampiros. Pero su peculiar encanto es todo mérito propio.
Seguro que esa referencia a Buffy no la ha incorporado Pjorge? (es un fan de la serie)
En fin, que igualmente quería serle fiel a mi tradición de que me regalen el libro de monólogos de Buenafuente por Sant Jordi… pero en el último momento he cambiado de opinión y me he llevado el de Polònia. Total, ya no veo el programa y el de Polònia tenía mejor pinta… Tampoco puedo dejar de citar un detalle de la contraportada de éste. Primero pone un listado de lo que se puede encontrar en el libro, y al final:
Vaja: de tot, menys literatura (Feliç Sant Jordi!).
No sé cómo se vive el día del libro en el resto de España, pero aquí siempre hay bastante polémica con los libros mediáticos, los que de alguna manera salen de la tele o la radio (bien sean de programas, como éste o el de Buenafuente, o presentadores que sacan un libro, como este año Jordi Basté), que se suelen llevar todo el éxito en ventas, apartando de alguna manera la verdadera literatura. Los autores de verdad suelen indignarse bastante ante este tipo de libros, pero en mi opinión tampoco es para tanto: hay espacio para todo, y a mí por lo menos a veces me apetece meterme en una buena novela, pero a veces me apetece leer algo sobre mi programa favorito. Por eso me ha hecho gracia la coña de los creadores de Polònia, primero en el título (anticipándose a los que pudieran etiquetarlo como libro mediático, ya lo incorporan en el libro) y después en la contraportada, asumiendo que Sant Jordi no es para la literatura. Pero es que es el día del libro, y los libros no tienen por qué ser literatura!