Arxius de la categoria 'reflexions'

Este agosto ha hecho 10 años que no me hablo con mi hermana. No recuerdo el día exacto, pero fue el último verano que pasamos en el camping de Cubelles (al año siguiente mis padres compraron la casa de Cunit, el pueblo de al lado… les gustó la zona). Tampoco recuerdo el por qué de la discusión que acabó con todo (lo poco que había), no era nada fuera de lo normal (unas trampas a las cartas o al parchís, seguramente), sólo que esta vez no hubo reconciliación (entre muchísimas comillas, porque lo que había normalmente era un sometimiento por mi parte para poder jugar a ser hermanas), la cosa se quedó así… y han pasado ya 10 años.

Alguna vez he comentado el tema por aquí, de pasada, y la gente no suele entenderlo (desde pequeña me habían dicho que “de mayores, ya os arreglaréis”, pero ese momento no ha llegado nunca), muchos te dicen que “al fin y al cabo, es tu hermana”… pero como le dije a auster hace un tiempo, en este caso es la hermana menor la que siente odio, celos o lo que quiera que sea… Mi madre me ha explicado muchas veces que cuando yo iba al cole y ella todavía no (tiene 3 años menos), cuando tocaba venirme a buscar después de estar de paseo con ella, pataleaba para evitar que viniera.

Llegeix la resta del post »

Ahora que vienen las vacaciones, Telemadrid, siempre al servicio de sus ciudadanos, ha preparado unas clases de catalán básico, para los madrileños que quieran disfrutar de unos días en la costa catalana (supongo que también servirá para la costa valenciana y balear, pero de esto no estoy muy segura). No he encontrado un vídeo insertable, así que tendréis que ir a esta página, evitar leer el texto (es un galimatías indescifrable, creo que resultado de una traducción automática del catalán) y darle al play (si queréis leer, tenéis el original de Telemadrid, pero el sistema de vídeo es horroroso).

Imagino que en unos días emitirán la lección de euskera y la de gallego, pero por si me la pierdo, cómo se dice helado? Heladoak y heladiño, respectivamente?

(vía compartidos en GReader de Lord Zoltan, que lo vio en Menéame)

Llegeix la resta del post »

En este país nos pirra lo gratis. No hay más que ver lo que pasa cuando en algún punto de la ciudad se reparten muestras de algún producto, los follones que se montan…

Cuando iba a la universidad, en el Campus Nord, se hacían muchas campañas de este tipo (supongo que se siguen haciendo): recuerdo los míticos “University Welcome Pack” (unas bolsas con muestras de productos variados que nos regalaban a principio de curso), los camiones llenos de garrafas de Sunny Delight (la gente se llevaba 3 o 4 garrafas, con lo asqueroso que está!), los helados de Ben & Jerry (que nos sirvieron de postre innumerables veces en las épocas de examen… y es que los Ben & Jerry están riquísimos! Lástima que, una vez aficionados a ellos, no haya demasiados sitios donde comprarlos…) y Frigo (éstos no estaban tan buenos, sólo tenían de fresa :P), los Ghostbusters de Nescafé (unos tíos que se paseaban por el Campus con una mochila tipo cazafantasmas, que te servían café gratis), las chicas que repartían pasta precocinada (esos espaghetti a la carbonara me solucionaron muchos fines de semana sola en casa!), el camión de bolis (había cola para que te regalaran unos bolis súper cutres!), los periódicos gratis (no los gratuitos, que también, sino El Periódico de Catalunya!) en época de exámenes (que amenizaban la cola de la biblioteca y gracias a los cuales procrastinábamos el inicio del estudio, haciendo tooodos los pasatiempos antes de abrir los apuntes)…

En Plaça Catalunya también hacen cosas de estas de vez en cuando, y la gente se apelotona por 1 DanUp (aunque luego cogen 4) o por un zumo raro que ni siquiera saben qué es (y luego suele estar asqueroso). Precisamente hoy he leído en el ADN que mañana regalarán desayunos en algunos puntos céntricos donde diariamente reparten el periódico. Yo antes solía dar un poco de vuelta en mi camino hacia los Ferrocarriles para pasar por donde el repartidor de ADN y llevarme mi ejemplar, ahora como lo cojo en Mataró, ya no suelo hacer esa vuelta… pero reconozco que tengo curiosidad por saber qué regalarán mañana.

Hemos llegado a un punto en el que parece que si no coges algo que es gratis es que eres tonto. True story, me pasó hace unas semanas. Os pongo en situación: el carnet universitario de la UPC es (o era, no sé cómo lo tienen ahora) de la Caixa Catalunya. Podías tener el carnet sólo o hacer que también fuera una tarjeta de débito, abriendo una cuenta gratuita allí o asociándole una que ya tuvieras. Por aquel entonces, el comercio por internet empezaba a despuntar pero todavía desconfiábamos al poner los datos de nuestra tarjeta, así que pensé que no me vendría mal una segunda cuenta bancaria, con poco dinero, para utilizarla en internet, y en caso de que me robaran los datos minimizar el impacto.

En el principio de los tiempos utilicé la tarjeta, tanto por internet como en comercios físicos (creo que regalaban algo por gastarte X dinero xDD), pero luego abandoné la cuenta. Las transacciones por internet ya eran más seguras y me era más cómodo utilizar mi cuenta principal que no andar moviendo dinero de una caja a la otra. Pero no la di de baja porque era gratis y me podía servir en algún momento.

Un día me llegó una carta de Caixa Catalunya conforme a partir de tal día empezarían a cobrarme mantenimiento. Fui a mi oficina a darla de baja, pero me dijeron que eso a mí no me aplicaba, porque yo tenía carnet de estudiante y con ese carnet no me cobrarían nada, así que la mantuve.

Hace un par de meses me llegó otra carta, esta vez diciendo que mi carnet de estudiante había caducado y que me pasara por la oficina para estudiar mis opciones. Primero fui a una de Mataró, donde la chica que me atendió me ofreció una cuenta gratuita el primer año, también me regalaban una maleta y no sé qué más, pero yo ya estaba cansada de ir posponiendo por tonterías el dar de baja una cuenta que no usaba desde hacía 5 años por lo menos (ni siquiera sabía cuánto dinero tenía allí!). El caso es que esta chica no pudo dar la cuenta de baja, tenía que ir a la oficina donde la abrí.

Fui a la oficina de mi barrio, me atendió otra chica que me ofreció algo parecido (cuenta gratis y otro regalo), le dije que no, me dio un papel para firmar donde vi que tenía 42 euros pero que me devolvían 38, firmé el papel, me dio el dinero y le dije:

[Cris] Esos 4 euros, a qué se deben?
[Caixa Catalunya #1] Son gastos de mantenimiento.
– Ya, pero cuando yo abrí la cuenta me dijeron que no había gastos de mantenimiento.
– Bueno, a partir de los 26 años sí.
– Vale, pero es que cuando me enviaron una carta diciendo que empezarían a cobrarme, vine a dar de baja la cuenta y me dijeron que por ser carnet de estudiante no me aplicaba.
– Ya, por el carnet no te cobramos nada, es por la cuenta.

A veces lo gratis no es gratis, y por querer aprovecharse de las promociones, te acabas pillando los dedos. Bueno, por lo menos ya podía olvidarme tranquilamente de Caixa Catalunya (que dicho sea de paso, tampoco me caen muy bien… nunca me han gustado los bancos que se esconden tras mostradores de cristal o te hacen dejar tus pertenencias en taquillas, te tratan directamente como a un atracador potencial)… o no. Porque a los pocos días recibo una llamada de un número oculto. Cojo el teléfono (debería colgar directamente, porque suelen ser llamadas para ofrecerte cosas que no quieres, pero la curiosidad me puede, y a veces es algún conocido que llama desde la oficina y sale oculto) y una chica me dice que llama de Caixa Catalunya para hablarme de mi carnet universitario.

[Cris] Es que yo ya lo di de baja la semana pasada.
[Caixa Catalunya #2] Ya, pero estamos llamando a todos los que teníais el carnet de la UPC para ofreceros unas condiciones ventajosas a la hora de abriros una nueva cuenta.
– Vale, pero no me interesa.
– Mira, te explico un poco. Es una cuenta gratuita durante un año, con una tarjeta de débito también gratuita, [bla bla bla, no me acuerdo exactamente de todo]y además, te regalamos una webcam.
– Vale, pero no me interesa.
– Bueno, piensa que es gratis, todo el mundo está aceptando esta oferta porque es gratis, y por el tema de la webcam.
[me estás llamando tonta o qué?]
– Ya, pero es que ya tengo webcam y no la uso, por mucho que sea gratis no lo quiero.
– Ah… Bueno, quedamos a tu disposición en el 93 [bla bla bla] por si cambias de idea, gracias.

No le dije nada de los 4 euros que me había costado mi anterior cuenta gratuita porque había gente delante y no quería parecer una pesetera, pero me quedé con las ganas… no por los 4 euros, que al fin y al cabo ya estaban perdidos, sino por replicar a su insistente es gratis

Si todavía estáis aquí leyendo en lugar de ir a abriros una cuenta en Caixa Catalunya para que os den una webcam gratis, es que sois tontos 😉

Actualización 27.05: Ains, qué ilusión! Cuando escribí el post la web estaba caída, pero hoy, buceando por la hemeroteca de Distorsió (la revista de la Escuela de Telecos de Barcelona) he encontrado la portada que, tomando el ejemplo de los espaguetis, hablaba de este fenómeno de lo gratis.

Hace ya casi 2 años que abandoné Bloglines y empecé a usar Alesti, un lector de feeds que había descubierto pocos meses antes y que aunque al principio no me gustó del todo, enseguida se corrigieron muchos de los fallos e introdujeron mejoras que lo hicieron, para mi gusto, el lector definitivo. Me gustó tanto, que incluso me metí a traducirlo al catalán! De hecho mi traducción está hecha (desde hace 2 años :P), pero el autor decidió esperar a la nueva versión que estaba preparando para introducir nuevos idiomas. Esa versión la llegamos a probar los traductores y algún betatester técnico, pero nunca vio la luz, porque Oliver (el autor) ya no pudo dedicarle más tiempo, y desde entonces el desarrollo de Alesti está parado. Una lástima, porque la nueva versión prometía…

Luego fue el gran boom de Google Reader (existía desde antes que Alesti, pero al principio era muuuy cutre!), y todo el mundo dejó Bloglines por el lector de Google… Yo me mantuve fiel a Alesti por mi implicación personal en el tema, pero es que además nunca me convenció Google Reader, pese a las mejoras que le iban aplicando. Y es que Alesti para mí es perfecto, como un lector de escritorio (lista de etiquetas, panel de blogs, panel de posts/vistas previas y panel de visualización del post) pero en cualquier parte. Google Reader sin embargo mezcla las etiquetas con los blogs, y el listado de post con su visualización, no está bien diferenciado…

El problema que tiene Alesti es su mantenimiento. Siempre ha tenido problemas de caídas frecuentes de servicio, y al principio cuando Oliver podía dedicarle tiempo, lo arreglaba enseguida, pero desde que se paró el desarrollo, la calidad del mantenimiento también descendió. La gente se pasaba por el foro (cuando funcionaba, que a veces también caía) y preguntaba qué narices pasaba, y los traductores (sobre todo el que hizo la traducción al euskera y yo) contestábamos como podíamos. Yo tomé por costumbre avisar a Oliver cada vez que caía, y en cuanto él lo arreglaba yo lo comunicaba en el foro. A veces tardaba unos minutos, pero a veces lo pillaba fuera de casa y Alesti se tiraba horas sin funcionar (creo que la cota máxima fueron un par de días, una vez). Salva siempre se cachondea de mí, dice que soy la única que usa Alesti, que el autor lo cerraría pero le doy penita y lo mantiene por mí… el otro día Pedro (el del blog que parece una Apple Store un martes cualquiera) se unía al cachondeo, ya les vale…

El caso es que últimamente Alesti se cae más de lo normal, y me he vuelto a plantear pasarme a Google Reader. Llevo un mes jugando con un par de feeds, y aunque sigue sin gustarme del todo la disposición del contenido, he de reconocer que la gestión de feeds (sobre todo a la hora de importar un OPML), aunque tiene algunos fallos (como no poder ver de un vistazo los feeds no taggeados… puedes seleccionarlos, pero no verlos todos juntos :S), es mejor que Alesti. Lo que no entiendo es por qué el panel de pijaditas (starred, trends, tus cosas y las de tus amigos) tiene protagonismo sobre el panel de blogs (está encima!) que, al fin y al cabo, es para lo que usas Google Reader! En el iMac no hay problema, la pantalla es suficientemente grande como para mostrar gran parte de las carpetas/etiquetas desplegadas, pero en el PC del trabajo (15″, además no uso Firefox maximizado) es bastante incómodo, la verdad.

Pese a mis reticencias, hoy he decidido importar los feeds para hacer el switch definitivo, he aprovechado para limpiar feeds dinosaurios, he reorganizado un poco las etiquetas (he observado que en Google Reader tienen más sentido como carpetas que como etiquetas, porque, aunque puedes aplicar más de una a un blog, sale duplicado en la lista, dentro de las carpetas correspondientes)… y una vez hecho todo, me encuentro con un tremendo WTF??!!:

Google Reader: WTF?!?!

Pensaba que los glitches con los feeds los había superado al abandonar Bloglines, pero parece que no. Me ha pasado con más feeds, y mientras escribía el post este caso en concreto se ha solucionado (sí había un post pendiente, ahora me lo muestra), pero no me fío… De momento intentaré mantener los dos lectores sincronizados, a ver qué pasa.

Hace unos días en el supermercado, pasando por el área de congelados a por unos Piccolinis Diavolo (unas minipizzas picantes de Buitoni, no logro encontrarlo en internet :S), un must en nuestra compra semanal (nos encantan y son un acompañamiento genial!), Salva me dijo:

A ver cuánto tardan en dejar de venderlos.

Miedo me da, porque confirmaría mi teoría conspiranoica: todo producto nuevo que me gusta mucho dura poco en el mercado, o bien al cabo de poco sólo lo encuentras en sitios remotos.

Recordáis cuando salieron los Doritos Dippas? A mí me encantan (tienen un sabor neutro que me gusta más que el de los Doritos clásicos), incluso me gustan más sin la salsa Dippas. Lo que a lo mejor no recordáis es la variante que salió poco después de los originales, porque duraron un abrir y cerrar de ojos: los Doritos Dippas sabor orégano. Adivinad quién debía ser la única que los compraba.

Llegeix la resta del post »

Hoy me lo he pasado teta en el trabajo… en realidad no he pasado por la oficina, he estado todo el día toqueteando teléfonos y haciendo pruebas en un cliente (concretamente, la empresa de PoloFresa, llamémosla PFSL). Que si ahora soy una secretaria y le capturo una llamada a mi jefe, que si ahora soy alguien de fuera de la empresa que llamo y pido a la operadora que me pase con X, que si ahora soy una operadora que transfiero una llamada a X, que si ahora escucho mis e-mails en el teléfono (mediante un TTS bastante más natural que el Loquendo :P), que si ahora soy un agente de Call Center y me escaqueo, pero luego soy un supervisor y le pongo online… ha sido divertidísimo poder jugar a mi aire con todos esos teléfonos, y putear al proveedor (en el sentido de preguntarle “y se podría hacer esto?”, “y se podría hacer de esta otra manera?”, “y qué pasa si…?”). Bueno, y PoloFresa no estaba, lo cual daba un plus (como diría mi queridísimo Samuel :P) de tranquilidad.

Uno de mis mayores defectos es mi miedo a equivocarme (inseguridad, le llaman :P). Esto tiene sus implicaciones, como que en clase era incapaz de levantar la mano para preguntar (tampoco para contestar una pregunta, aunque la supiera… pero y si no me la sabía bien? :P), que diga con demasiada frecuencia “no sé” para no arriesgarme, que prefiera que los demás hablen primero, mi timidez (aunque en este caso no sé qué es consecuencia de qué :P)… Por eso me siento bastante resguardada cuando voy a los sitios con mi jefa, porque sé que la que lleva la voz cantante es ella, y a mí sólo recurrirá para preguntarme cosas que sé (aunque me dé pánico igual porque… y si me pregunta algo que no sé? :P). Aunque he de reconocer que en este sentido me voy soltando y me gusta intervenir y dar mi opinión o sugerencias… pero claro, suele estar ella de backup. Esta semana ha sido algo estresante porque aparte de trabajar en otros 2 proyectos, el de PFSL sigue a contrarreloj y esta semana tenían que empezar a hacerse las pruebas de la maqueta de voz, que me ha tocado realizar a mí… en solitario (bueno, en realidad ha venido conmigo un compañero, pero era más por ver él cómo funcionaba, por curiosidad, porque él no está implicado en el proyecto). Y ayer me agobié un poco: “y yo qué sé cómo tiene que funcionar esto? Y yo qué sé cómo operan un jefe y una secretaria? Sólo sé que no sé nada.” Pero hoy he visto que mi jefa tenía razón cuando me decía que sé bastante sobre telefonía IP (y sobre todo del fabricante Cisco, que es el que se implanta aquí) y que no tendría problemas porque me conozco la configuración al dedillo (no en vano he sido yo quien la he trabajado con PoloFresa).

Ya había estado presente en otras pruebas de maqueta (esto consiste en que antes de empezar a configurar todos los teléfonos y ponerlos en su sitio, se comprueba con una pequeña muestra y en un entorno lo más real posible pero controlable la configuración de todos los elementos deseados: sistemas de Call Center, sistemas jefe-secretaria, funcionalidades básicas de una llamada como transferencias o llamada en espera… porque todo esto, aunque parezca trivial, no lo es, y a veces por falta de configurar un parámetro hay algo que no funciona. La maqueta está para detectar estas cosas), pero siempre con mi jefa, que es muy echá p’alante y enseguida se pone a tocarlo todo… que el proveedor no sabe qué pasará si el usuario hace X? Pues lo probamos, no hay problema! Claro, yo normalmente me quedaba en segundo plano y apuntaba los resultados (lo que podía, porque ella iba a su bola…). Pero hoy he sido yo la que he tenido que tocarlo todo, y me he sorprendido proponiendo hacer las pruebas más variopintas, y pidiéndole al chico que lleva la configuración (al proveedor) que me configurara ahora esto, y ahora lo otro, para poder probar tal casuística. Me he sorprendido sintiéndome cómoda, en definitiva. Y lo más importante, he aprendido aún más cosas.

Lo mejor para mi autoestima ha sido cuando mi jefa y el jefe del chico que estaba conmigo haciendo las pruebas (del proveedor, me refiero) se han pasado por la sala (hoy había reunión de seguimiento del proyecto, a la que no he podido asistir por las pruebas… de hecho estaban planificadas para toda la mañana pero me he tenido que quedar a comer allí), han preguntado qué tal iban las pruebas, les he comentado por encima la situación, lo que estábamos probando en ese momento, y cuando le he pedido una prueba al chico y me he dirigido hacia un teléfono, el jefe le ha dicho a mi jefa:

Ésta es de tu escuela, eh? Va a saco, a probarlo todo, como tú.

Lo cierto es que sí, soy de su escuela, de ella es de quien he aprendido a hacer lo que he hecho hoy (aunque hasta hoy no lo supiera). Como hablábamos el chico del proveedor y yo mientras comíamos, lo bueno que tiene trabajar en nuestras empresas (las 2 son bastante pequeñas, aunque la mía le gana por goleada :P) es que al ver muchos proyectos diferentes, se aprende muchísimo. Por su parte, sobre configuración (más a bajo nivel) de equipos, aunque ve diferentes tipos de empresas y la operativa de cada una, y por la mía, sobre funcionalidades y configuración (a un nivel más alto, o menos técnico) de equipos, aunque también al trabajar con ellos aprendes algo más técnico.

A veces hay que aceptar que un jarrón roto, por mucho que lo intentes, no se puede arreglar. Le pondrás pegamento, pero de vez en cuando volverá a desquebrajarse, y te entristecerás y te enfurecerás a la vez porque nunca podrás recuperar aquel jarrón. Nunca pensé que podía pasarme a mí (éramos las Gilmore!), pero hace tres años que mi jarrón no es el mismo. Es como una montaña rusa, a veces no se ve la grieta y todo parece perfectamente normal, pero cuando la grieta se abre da paso al silencio. Lo malo es que no sabes si ese silencio es indiferencia, o si es la calma que precede a la tormenta (no sería la primera vez). Y no sé cuál de las dos cosas es peor, la verdad. Y caminar en silencio te obliga a pensar, y darle vueltas a las cosas sólo hace daño. Habrá que aceptarlo, pero es difícil, porque a una le gustaba ser Rory Gilmore…

Hoy me ha dado un bajón bastante importante, pero he llegado a casa y me he animado al descubrir los nuevos iPods. El Nano es como el fake de hace unos días; nunca me ha interesado en exceso este iPod pero no está mal, ahora se pueden ver vídeos aunque lo encuentro menos ergonómico que el anterior (habrá que verlo en directo… mañana en la Apple Shop?). El Shuffle sólo lo han repintado (nada de 2GB, esta vez la bola mágica te ha fallado, Samuel :P), en general estos colores me gustan más que los anteriores (son menos chillones), y el rojo es precioso (me gusta más que el naranja, aunque normalmente este último sea mi color favorito). El iPod normal (ahora apodado Classic) lo han tuneado externamente (desaparece el blanco y el aluminio entra en escena, alguien lo dudaba?), también habrá que verlo en directo porque en foto no me mata mucho… y han aumentado la capacidad, que no es poca cosa: 80GB el pequeño… y 160GB el grande! El mío de 30GB me costó lo mismo que vale ahora el de 160GB, snif

Y por qué le han añadido la coletilla Classic? Porque hay que diferenciarlo de un nuevo iPod: el Touch (aka iPhone sin phone). He llamado a Salva y en cuanto he pronunciado la palabra touch me ha dicho que se lo compraba al llegar a casa, pero parece que este modelo no va a estar todavía a la venta (a lo largo de este mes… bueno, de hecho sí se puede comprar, pero no lo envían hasta el día 28). Las capacidades son ligeramente inferiores (8GB y 16GB), y el precio significativamente superior, pero 16GB es un tamaño aceptable para disfrutar de esa maravilla que es la pantalla multitouch (me voy a hartar de ampliar y reducir imágenes), teniendo en cuenta que tengo un Shuffle de 1GB y un Photo de 30GB, que ya me sirve para cargar con mi biblioteca musical. De todas maneras el de 160GB no me lo compraría, que hay discos duros más baratos (además, entre Salva y yo en estos momentos contamos con casi 2TB de almacenamiento, sumando ordenadores y discos duros) y con música no lo llenaría nunca.

Cuando estaba llamando a Salva, he visto la palabra Starbucks en el seguimiento de Engadget. Dos de mis empresas fetiche interconectadas? What the Frak! Podremos pedir un Frappuccino desde el iPod, como Steve Jobs en la MacWorld de este año (pidió 200 Frappuccinos para todos los asistentes desde su iPhone)? Pues no tanto, pero sí hay una alianza (que llevaba fraguándose dos años, así que la broma de la MacWorld cobra ahora un nuevo sentido), por lo visto si vas con tu iPod Touch a un Starbucks y te gusta la canción que está sonando, la puedes comprar con un clic (bueno, en realidad con un toque de dedo :P). Porque no lo había dicho, pero Apple ha abierto una nueva tienda: la iTunes WiFi Store, para poder comprar música directamente desde tu iPod Touch (o el iPhone, para el que sacarán una actualización a lo largo de este mes).

Pedro le preguntaba a Salva en su último podcast si yo me compraré el iPhone cuando salga. Nunca lo había considerado como una opción realmente, pese a que cuando fuimos a verlo a Sant Cugat mi post se tituló Vull un iPhone!! (por cierto, el lunes me encontré con Xavier Sitjà yendo hacia mi oficina, qué flash cuando me pita un coche y veo que es él, saludándome… es lo que tiene trabajar en una urbanización de Sant Cugat :P): me encanta la interfaz (cualquiera que me viera en la CampusMac con el iPhone de Samuel lo corroborará) pero creo que es más cómodo un móvil con teclas, sobre todo para escribir SMS (reto a cualquier poseedor de un iPhone a una carrera). Pero siempre he dicho que si ponían a la venta la parte iPod del iPhone, me lo compraría. Y aquí está, y no sólo es un iPod, sino que incorpora Safari y WiFi (y os prometo que no esperaba que lo tuviera, como decía Samuel, a priori parece un iPhone killer). Ya me veo en mi terracita leyendo blogs, con Salva al lado… leyendo blogs también 🙂

Plan Avanza

No sé si conocéis el Plan Avanza, es un programa del estado para impulsar la expansión de las nuevas tecnologías y sobre todo, el acceso a internet de banda ancha (si lo que tenemos aquí se puede llamar así :P). Entre las ayudas previstas, hay dos bastante interesantes para los que os compréis un nuevo ordenador: el Préstamo para Jóvenes y Universitarios (si tenéis entre 18 y 35 años) y el de Ciudadanía Digital. Se trata de financiar la compra de un ordenador a interés cero y sin ningún tipo de comisión (ni de apertura, estudio, amortización o cancelación anticipada), con dos condiciones: que el ordenador tenga acceso a internet (no hay problema, el mío tiene dos redes :P), y que tengas (o contrates) internet de banda ancha en casa. La diferencia entre los dos préstamos, pues no la tengo muy clara (yo soy joven y me he acogido al de Ciudadanía Digital :P), pero el período de amortización en el de jóvenes y universitarios es de 60 meses (5 años, que me parece muchísimo para un ordenador), y el de ciudadanía digital, 36 meses (3 años, que ya es más razonable). Aquí tenéis todas las características de ambos, y también una lista de entidades asociadas. El que os enlazo es el de este año, que acaba a final de este mes, pero es de suponer que lo ampliarán un año más (al fin y al cabo, lo que no pagas tú en intereses lo paga el estado a través del ICO, así que tienen un presupuesto anual).

Cuando conocí este programa, a finales del año pasado, me fui a informar a mi caja de ahorros (parlem?), ya que en primavera tenía previsto comprarme el iMac (ahora primavera es en agosto :P), y me indicaron la documentación que tenía que aportar: contrato de trabajo y 3 últimas nóminas, última factura de la conexión a internet (o contrato, si la das de alta para el préstamo), última declaración de la renta (si la haces), DNI y… la factura del ordenador. Es decir, que primero tienes que comprarte el ordenador (ergo tienes que tener el dinero), y luego solicitar el crédito y, si te lo conceden, te ingresan el dinero y empiezas a pagar poco a poco. El condicional es importante, porque si no tienes un contrato fijo te pueden solicitar avales o ponerte pegas.

Mi historia: el miércoles pasado fui a hacer la transferencia del iMac, y a empezar a tramitar el crédito. La chica que me atendió me dijo que la duración era fija (es decir que los 36 o 60 meses no son máximos) y que como la duración de mi contrato es menor a la del crédito (en mi empresa hacen contratos temporales los dos primeros años, el mío ahora me dura hasta julio, cuando en teoría me harán indefinida), necesitaría un aval. Además, me dijo que la comisión de cancelación era de un 1% (de lo que reste por pagar), lo que no me pareció nada bien, por mucho que ella me dijera que en el peor caso (si cancelara el crédito nada más pedirlo) sólo pagaría 15 euros, si según el ICO no hay comisiones, una comisión del 0.00000001% ya me parece un timo. Pero como hacía bastante tiempo que había mirado las características, pensé que a lo mejor lo recordaba mal, así que no le dije nada.

Llegué a casa y volví a leerme las características, y por si acaso, envié un mail solicitando confirmación de la duración del crédito (máxima o fija) y las comisiones. Ya que como ahora en verano mis padres no están por aquí, es un engorro tener que pedirles que vengan para firmar el aval (hay que formalizar el crédito antes del 31), y a las malas, prefiero pagar el crédito en 11 meses (lo que queda para que acabe mi contrato, así no necesito aval). En apenas dos días me contestaron, dándome la razón en las dos preguntas. Así que me imprimí la respuesta y fui a ver a la de la caja, que se quedó a cuadros. Se hizo una fotocopia, pero me dijo que en el programa informático ella tenía unos plazos fijos que no podía modificar. Yo ya no podía hacer nada más, así que le dije que lo cancelara. Si lo sé, lo pago a 3 meses con la Apple Store, pero bueno.

A última hora me llamó y me dijo que lo había consultado y yo tenía razón en la comisión: hay comisión de cancelación en los créditos para PYMES, pero no para particulares. Lo del periodo de amortización sí que es fijo en principio (como me había dicho, ella no lo puede modificar en el ordenador), pero como no hay comisiones, puedes acortarlo lo que quieras. En cuanto al aval, al final no me hace falta porque tengo algunas cuentas de ahorro (la cuenta vivienda y otra que me abrieron mis padres hace mucho tiempo). En teoría la semana que viene tengo que quedar para firmar, bien! Así que diez puntos para la chica de la caja, que aunque al principio estuviera equivocada, pese a que yo le dije que lo cancelara ella continuó investigando, se miró mis cuentas y comprobó lo de la comisión, y me llamó para informarme. Incluso este viernes me envió un mail explicándome cómo estaban las cosas. Da gusto encontrarse con empleados así, otro hubiera pasado del tema y yo me habría quedado sin crédito.

Una última aclaración sobre el aval, que parecen palabras mayores pero en realidad es una cosa muy sencilla. A nosotros para el piso nos han pedido un aval, en este caso se trata de un aval bancario, que significa que tienes un dinero retenido, que no puedes tocar, y que el beneficiario del aval puede obtener si tú dejas de pagar el alquiler, te vas y dejas el piso destrozado, etc. Por tener este dinero retenido el banco te cobra una comisión (sí, rapiñan dinero por todo). Pero en el caso del crédito ICO, es un aval de garantía, que simplemente significa que si tú no pagas, la otra persona se hará cargo del pago. No le retienen ningún dinero y no paga ninguna comisión. Ideal para estudiantes, que suelen tener trabajos temporales o esporádicos, y padres avaladores 😉

Hoy he empezado la jornada intensiva. Es un alivio no tener que prepararme la comida de cada día la noche anterior (mis padres ya han inaugurado la temporada de vida en Cunit y por aquí no se les ve el pelo… aunque tendré que acostumbrarme a no tener que depender de mi madre!), pero también es un rollo llegar a las 16h y no tener la comida preparada (nota: mi madre es antimicroondas total, así que no tenemos… con lo cual hay que hacer la comida al momento, a menos que sea algo frío), y depende de lo que tardes en hacerla comes a las 17h…

Para celebrarlo, hoy había incidencias en los ferrocarriles. Mira que yo siempre los defiendo frente a Renfe (una cosa está clara, no se estropean ni la mitad de veces: esta es la segunda vez, en todo el año que llevo utilizándolos, que tengo problemas, y la primera fue por causas ajenas a la empresa), pero la verdad es que hoy no se lo han montado muy bien. Llego a la estación y me dicen que hacia Barcelona no hay trenes (sí en el otro sentido), pregunto si tienen una estimación de lo que tardarán en arreglarlo y me dicen que no, yo de todas maneras entro en la estación y me dirijo al fondo de todo porque Bob viene detrás y paso de aguantar el tostón con él. Por los altavoces sólo avisan de que la frecuencia de paso de los trenes hacia Terrassa y Sabadell es de 20 minutos (o sea que en el otro sentido tampoco van finos). Y unos 10 minutos después aparece un tren en dirección a Barcelona, pero por la otra vía. Sin avisar ni nada, para qué! Total, que todos los del andén normal de Barcelona salimos corriendo hacia el paso subterráneo para cruzar al otro lado. Por suerte, el tren nos ha esperado, sólo faltaba! Luego, obviamente, tipo lata de sardinas hasta Barcelona. Pero todavía no ha llegado lo mejor.

Llegamos a Sarrià, se apagan las luces del tren (y el aire acondicionado también, imaginad tal masa de gente al mediodía y sin aire acondicionado). Al poco se encienden… y se vuelven a apagar. Y así 5 o 6 veces. Luego cierran las puertas del tren, parece que va a emprender la marcha… pero no! Y las luces siguen apagadas. En esto que dicen por la megafonía del tren:

Atención, señores viajeros. El tren no puede salir de la estación porque está estropeado. Estamos intentando hacerle un reset.

Como decían dos chicos que estaban delante mío, entre carcajadas, debían estar intentando darle a Ctrl+Alt+Supr. Pero este festival del humor se estaba dando con las puertas cerradas! La gente empieza a ahogarse, y después de unos minutos vuelven a abrirlas. Entonces hay una huida general de la gente que piensa que el tren va a quedarse ahí de por vida, y yo aprovecho para sentarme (a estas alturas el aire acondicionado, aunque bastante suave, ha vuelto), que una de mis tradicionales bajadas de tensión veraniegas ha hecho acto de presencia y estoy algo mareada. A los 5 minutos el tren empieza a pitar, la gente vuelve a subir como puede, y reanudamos la marcha sin más incidencias.

Esto me ha hecho recordar algo sobre lo que quería escribir hace tiempo (como tantas otras cosas que tengo pendientes…) y que siempre procrastino: la gente rara que te encuentras en el tren.

Llegeix la resta del post »

No sé si conocéis Espoiler, el blog de televisión de El País. Lo escribe Hernán Casciari, autor de Orsai y varios blogs de ficción. Yo descubrí sus blogs años ha, pero la verdad es que no me interesaron mucho, así que no los leo asiduamente (por no decir directamente que no los leo). Lo que sí leí en su momento, gracias a que ShAkEr lo enlazó (y lo recupero porque hace poco lo volvió a hacer en ¿y tú qué miras?), es el famoso artículo Los justos, que está bastante bien.

Volviendo a Espoiler (qué feo queda escribirlo con la e!), lo leo desde que lo lanzaron, hace un mes aproximadamente, con bastante recelo. Recelo porque el autor tiende a tratar al lector de analfabeto. Literalmente:

Ésta es terminología que utiliza la gente rara en los foros para que usted, amigo analfabeto digital, se eche atrás antes de comenzar.

Dado que usted es analfabeto digital, doy por sentado que usa Windows.

—¿Y ahora falta mucho para que pueda mirar la serie? —dirá usted, ansioso como todo analfabeto digital que está a punto de ver la luz.

Pero no son las únicas lindezas que le dedica:

Supongamos que usted se va de vacaciones a la playa, o tiene que estar una semana en hoteles de paso, o puede que usted sea un hippie asqueroso de ésos que se siente satisfecho de no tener un televisor en casa.

Ya sé que usted tiene el RealPlayer y también el Windows Media. No me importa. Haga lo que le digo y no interrumpa.

Usted no ha nacido para saber, sino para disfrutar de lo que desconoce.

Quizás sea una marca de estilo que yo no comprendo porque no le conozco, ya digo que no leo sus otros blogs, pero a mí personalmente me resulta incómodo leer frases como éstas. Si su intención es divulgativa (al menos así lo afirma en el primer tutorial), se puede ahorrar las coñas, yo creo que a su público objetivo no le gustará ser llamado analfabeto digital. Por otra parte, su tonillo condescendiente me parece que viene a darle la razón Javier Pérez de Albéniz cuando decía que los que nos bajamos las series por internet nos creemos superiores por ello (yo ya comenté que no estaba de acuerdo; por cierto, hace poco en la columna de TV del ADN Daniel R. Caruncho se quejaba de que la Wikipedia era un spoiler con patas… pero si las secciones que contienen revelaciones sobre la trama de cualquier cosa están perfectamente identificadas!).

Pues bien, hoy Casciari habla de TV3. Si bien creo que tiene razón en algunas cosas, en otras patina bastante… aunque lo que más me molesta siguen siendo las formas. Sinceramente, creo que busca el éxito mediante la polémica, y a ello le ayudan fanáticos opinando a favor y en contra suyo (personalmente, como catalana, me da especial rabia la gente que deja comentarios en catalán; creo que es de mala educación llegar a una casa que no es la tuya y hablar un idioma que tu anfitrión no entiende… por supuesto que me hierve la sangre al ver comentarios de fanáticos arremetiendo contra una de mis lenguas maternas, pero dicen que uno debe ser más crítico con los argumentos de los más afines). Y como en ese post ya casi nadie debe leer los comentarios, sino que la gente llega y vomita sus pensamientos, me propongo reflexionar aquí sobre lo que dice (sí, todo lo anterior era la introducción del post, he vueltoooo!! :P).

Llegeix la resta del post »